jueves, 22 de diciembre de 2011

Familia y Prevencion en el consumo de drogas ( 2da parte ).

Familia y Prevencion en el consumo de Sustancias Psico Activas ( SPA ).

2da parte
GONZALES DE REGADAS, (p.cit. )

Familia.
El conjunto de las relaciones de producción forman la estructura económica de la sociedad, la base real sobre la que se levantan  la superestructura jurídica y política, y a las que corresponden determinadas formas de conciencia social.
Las ideas se explican en última instancia por la economía, pero también tienen una acción que les es propia.
Es un juego mutuo de acciones y reacciones entre todos estos factores, en el cual a traves de toda la muchedumbre infinita de casualidades, acaba siempre imponiéndose como necesidad, el movimiento económico.
( POULANTZAS, Georges.” Principios de Filosofía”. ).

La ideología la integran las actitudes psicológicas y motivaciones psicosociales, y el sistema de representaciones mentales y de creencias, que desarrollan y ejecutan los individuos en la sociedad
( Althusser, 1970 ).                          
La familia devota y prodigadora de cuidados permite lograr una comunidad libre de drogas.

La disgregación, la anomia la violencia y el caos familiar, son crecientemente vistos como normales por su frecuencia estadística, frente a aquellas fuerzas que “ normalmente “ existen en el interior de la familia y que la ayudan a cohesionarse, estructurarse, organizarse, y que ayudan a sus miembros a diferenciarse entre si y a crecer en una matriz de seguridad afectiva y de confianza.

Hoy en día falta una relación de reciprocidad plena entre los miembros de las diferentes generaciones que conviven en la familia, así como actuar de moderadora entre las diferencias existentes entre sus componentes, y la falta de un proyecto común expresado a través de un código simbólico al que todos adhieran.

Muchas de las actuales familias han dejado de ser la forma humana fundamental donde se produce sentido en la vida cotidiana.
Enfatizamos la trascendencia que tienen para la familia, como elementos cohesionantes, la solidaridad, el respeto y la tolerancia por las diferencias y la libre elección en función de los deseos propios, sin menoscabo del bien común.

La discusión se ha ido desplazando del énfasis en lo económico como causa fundamental de la desorganización familiar tradicional, para considerar el cambio de valores y referentes como núcleo central de la problemática adictiva, en ciertas familias.

Si hay un vaciamiento del sentido de la vida y un relleno ulterior a través de los medios de comunicación, de los emblemas de poder, del consumismo... entonces, la droga viene a llenar también ese vacío.

En Oriente, la llamada “ familia tradicional “, la que sigue una tradición histórica nacional, regional o local, no existe porque los procesos de cambio de la economía mundial han conducido a la separación de sus miembros, a la falta de convivencia y contacto entre múltiples generaciones, al individualismo, a la fragmentación.

Los jóvenes desarraigados de sus lugares de origen y de sus familias, para ir a trabajar a los centros de producción, apelan a sus pares y a las imágenes proporcionadas por la “ mass media “ como modelos de identificación para la construcción de una identidad cohesiva.

En la Sociedad Urbana Occidental, la familia es frágil y escindida por los conflictos identatarios de sus miembros. Falta la producción colectiva de sentido de la vida cotidiana, de momentos de goce compartido y de transmitir a los demás miembros los sentimientos propios.

De otro lado, ” la familia aglutinada “ impide la emergencia de las diversas identidades, no permitiendo el desarrollo de procesos tendientes a la separación e individualización. Tiende a expulsar o abandonar aquellos miembros que no se adaptan pasivamente a este tipo de funcionamiento.

La espiritualidad liga al hombre con su historia, su linaje, su terruño, los valores y el impulso a seguir creciendo e ir hacia delante, creando a partir de esa argamasa.

Baumrind ( 1991, en: BENAVENTE, M. “ Coadiccion “. Ñaña, 2003 ) estudia la relación entre afecto y control, específicamente los patrones de ejercicio de la autoridad en las familias.

Trabaja dos conceptos importantes:
-            Exigencia : Conducta de supervisión, esfuerzos disciplinarios; expectativas de que se ajusten a su nivel de madurez , y confrontación con los hijos cuando desobedecen las normas.
-            Sensibilidad : Grado en que los progenitores potencian la individualidad y la autorregulación, a traves de la atención y apoyo a las necesidades de cada hijo.

Los progenitores autoritativos  supervisan la conducta de sus hijos y proporcionan normas claras de conducta. Son afectuosos  pero no intrusivos. Quieren que sus hijos sean autónomos  a la vez que cooperativos.

Baumrind encuentra que en las familias autoritativas, los adolescentes recurren menos al consumo de SPA.
Asimismo, encuentra que este tipo de familias evita comportamientos problemáticos en las fases de su desarrollo evolutivo
Todas las familias poseen recursos auto terapéuticos pasibles de ser activados. Por tal motivo, la Comunidad terapéutica o las terapias familiares no son un fin en si mismas, sino un medio al que se recurre temporalmente.

 Pedro Quiñones
INSADEH

2da parte de 3.

No hay comentarios:

Publicar un comentario